Diarios europeos ponen la lupa sobre situación de los universitarios y DDHH en Venezuela
Medios suizos visibilizan la situación de los derechos humanos y de los derechos universitarios en Venezuela. El ‘‘Tribune de Geneve’’ y ‘’24 heures’’ publicaron en sus portales la entrevista que realizaron a Ricardo Villalobos, abogado, profesor universitario, coordinador de investigación e incidencia internacional de la ONG Aula Abierta, e invitado a Ginebra para intervenir en una capacitación del Servicio Internacional para los Derechos Humanos.
¿Cómo ha cambiado la situación durante dos meses? ¿Puede la visita de la Alta Comisionada para los Derechos Humanos cambiar la situación?
Sobre la situación de Venezuela, la crisis y la represión están empeorando y las condiciones de vida son cada vez más catastróficas, es como un verdadero descenso al infierno.
La situación no ha mejorado, las violaciones de derechos humanos son generalizadas, las personas que critican al gobierno son acusadas de traición, amenazadas de muerte, golpeadas por civiles armados (llamados “colectivos”), el número de presos políticos es de al menos 700 personas. Michelle Bachelet pidió su liberación y prometió establecer equipos de observadores en Venezuela. Este considero es un paso positivo y al menos dirige la atención internacional sobre lo que está sucediendo en nuestro país.
¿Y la crisis humanitaria?
La prestación del servicio eléctrico es un desastre. El 7 de marzo ocurrió un apagón que privó al país de electricidad durante más de siete días, y desde entonces los cortes de energía han sido cada vez más frecuentes.
La situación es especialmente crítica en el interior del país, como en el estado Zulia donde tengo mi residencia y donde el calor es intenso, solo tenemos dos o tres horas de energía eléctrica al día. Esto trae consecuencias muy graves, la conservación de los alimentos es difícil puesto que no hay como refrigerarlos, los productos perecederos desaparecen de las tiendas y la red de distribución de agua potable también se ve afectada. No se pueden mantener encendidos los equipos de los hospitales, lo que ocasiona la muerte de muchos pacientes.
En Zulia, por ejemplo, hubo oleadas de saqueos en las tiendas cuando ya no era posible realizar pagos electrónicos, los cuales constituyen el principal modo de realizar transacciones en Venezuela porque no hay suficientes billetes en circulación. Por otro lado, se realizan extensas colas en las estaciones de servicio para surtir gasolina, en el Zulia y en otras partes del interior, la gente espera de tres a cinco días por solo 30 litros, duermen en sus vehículos y pasan el día sentados en el calor. Es algo surrealista.
¿Maduro amenaza a las universidades?
Definitivamente, el gobierno está tratando de silenciar las universidades, por cuanto constituyen lugares de debate crítico y por el hecho de que los estudiantes a menudo desempeñan un papel principal en los movimientos de protesta. La autonomía de las Universidades está prevista en la Constitución, sin embargo, esta es frecuentemente violada. El organismo nacional de selección de estudiantes premia a aquellos que son activos en la vida comunitaria en lugar de las habilidades académicas.
Los profesores reciben salarios de pobreza, un equivalente entre 4 y dólares por mes. La mitad de los profesores de las facultades se fueron y aproximadamente dos de cada cinco estudiantes desertaron, dando como resultado universidades que están vacías. De los jóvenes que protestaron entre enero y abril al menos 41 fueron detenidos, muchos fueron juzgados, en algunos casos por un tribunal militar y desde 2017 al menos 21 estudiantes han perdido la vida en protestas.
¿Cuál es el estado de ánimo en la población?
Los venezolanos están huyendo, según estimaciones conservadoras, más de cuatro millones de personas ya han abandonado el país en los últimos años. Las familias se dividen, mi madre está en Colombia, mi tía está planificando irse a los Estados Unidos. Sin embargo, todavía hay alguna esperanza, los venezolanos esperamos.
Entrevista disponible en Francés: