Bolivia: Universidades rechazan creación de la APEASU por temor a la violación de la autonomía
Autoridades universitarias se pronunciaron en contra de la Agencia Plurinacional de Acreditación del Sistema de la Universidad Boliviana (APEASU), por temor de que por medio de esta se manifiesten atropellos a la autonomía universitaria.
La APEASU será conformada por autoridades del Estado, representantes de las Universidades Públicas y Autónomas (APU) y representantes de las universidades privadas, y funciona a través de la Comisión Nacional de Acreditación de Carreras Universitarias (CNACU), constituida de conformidad con la Ley 070 de la Educación “Avelino Siñani-Elizardo Pérez del 20 de Diciembre del 2010. Este órgano se encargará de evaluar y acreditar en conjunto con ambos sectores universitarios.
La Agencia Plurinacional de Acreditación del Sistema de la Universidad Boliviana (APEASU), fue creada con la intención de lograr un avance en la educación, debido a los bajos estándares en los que se encuentran ubicadas las universidades bolivianas en Latinoamérica y el mundo.
Desde la creación de dicha agencia, algunas autoridades de los distintos recintos universitarios se han manifestado en su rechazo, entre ellas, la ex Rectora de la Universidad Mayor de San Andrés (UMSA), Teresa Rescala, en el año 2012. “La creación de la Apeasu vulnera la Autonomía Universitaria, es el incumplimiento al compromiso firmado con el Comité Ejecutivo de la Universidad Boliviana (CEUB) por parte del Ministerio (de Educación) que será debatido en una conferencia nacional de universidades”, aseguró según el medio digital “EJU”.
Por otro lado, el rector de la Universidad Pública de El Alto (UPEA), Dámaso Quispe, manifestó que le sorprendió la noticia. “Nosotros no hemos hablado (al respecto) aunque hemos tenido reunión con el ministro (de Educación, Roberto Aguilar), donde no se ha tocado. Nosotros podemos decir que (el Gobierno) no puede inmiscuirse en la Autonomía Universitaria”, sostuvo Quispe, según el medio digital “EJU”.
Debido a esto, se han frenado los intentos por aplicar el sistema de acreditación APEASU a ambos sectores universitarios. Es decir, en casi diez años no ha existido una aplicación de acreditación y evaluación distinta a las realizadas por el Comité Ejecutivo de la Universidad Boliviana (CEUB) y las que realizan el sector privado de forma autónoma.
Preocupaciones sobre el sistema de evaluación y acreditación de las APU
El Comité Ejecutivo de la Universidad Boliviana está encargado del procedimiento de evaluación de las Universidad Públicas y Autónomas (APU) de Bolivia. Por medio del “Reglamento General de Evaluación y Acreditación de Carreras y/o Programas”, en su artículo 9, establece que las evaluaciones a desarrollarse se harán a través de: “a) Autoevaluación; b) Evaluación Externa, por pares académicos y c) Evaluación Síntesis.”
De esta manera, la autoevaluación se convierte en un factor de carácter obligatorio y la evaluación externa por parte de pares académicos con un carácter voluntario para la acreditación.
Álvaro Deuer, profesional del desarrollo social y quien fue analista de la autonomía y economía local en La Paz, Bolivia, planteó una preocupación, debido a que el sistema de acreditación no realiza un seguimiento sobre la calidad con la que se imparte la educación y su relación con los resultados de transformación de un estudiante al culminarse su carrera universitaria.
La forma más evidente de la calidad impartida en las universidades públicas y autónomas se encuentra en el ranking. La mejor posicionada es la Universidad Mayor de San Andrés en el puesto N° 202 a nivel de Latinoamérica y con respecto a su posición en el mundo ocupa el puesto N° 2981, lo que se convierte en una gran preocupación porque Bolivia es el segundo país de Latinoamérica que más asignaciones de dinero otorga a la educación.
Ante esta realidad, la acreditación del Comité Ejecutivo de la Universidad Boliviana (CEUB), ha sido cuestionada como un mecanismo para que las universidades obtengan otros beneficios distintos a acreditar y garantizar la educación de calidad en los recintos universitarios en Bolivia.
El abogado y profesor de la Universidad Mayor de San Andrés de Bolivia, William Mariaca, afirmó que dentro de las Universidades Públicas y Autónomas (APU), “ninguna decisión es solo organizativa, sino política, ya que potencialmente puede mejorar o enterrar las aspiraciones políticas”.
Sistema de evaluación y acreditación de las Universidad Privadas
La situación de las Universidades Públicas y Autónomas es distinta a las universidades privadas, las cuales se rigen a través del “Reglamento General y Reglamentos Específicos de Universidades Privadas” (RGUP), con respecto al artículo 8, que son las propias universidades privadas quienes determinaran las instancias, procesos, procedimientos e instrumentos de la autoevaluación institucional, elaboración de informe de autoevaluación y planes de mejoramiento institucional y por programas.
El mismo RGUP establece que las Universidades Privadas deben contar con un órgano de autoevaluación que cree y aplique sistemas, que permitan el mejoramiento de la calidad institucional, bajo una observación mínima del Ministerio de Educación.
Al respecto, Álvaro Deuer, ratificó las preocupaciones acerca de la calidad, en las que se toma en cuenta cada una de las limitaciones que tienen las entidades. Por medio de esto, solo evalúan las condiciones necesarias para dar clases tanto de profesores como de estudiantes.
Al examinar los rankings de las mejores universidades del 2019, aunque estas no sean administradas por el Estado y no reciben recursos por parte del gobierno, la primera de estas instituciones es la Universidad Privada Boliviana, cuya posición es la 631 a nivel de Latinoamérica y la 6398 a nivel mundial. Las posiciones de estas universidades se encuentran muy por debajo en comparación con otras universidades de Latinoamérica y el mundo.
Esta situación genera preocupación sobre la eficacia en los sistemas de evaluación, la educación de calidad en las universidades que afectan a la población estudiantil y profesoral, tal como ocurre en el caso de las APU.
Ante esto, es necesario que exista un consenso entre las universidades y el Estado de Bolivia para el trabajo en conjunto sobre las preocupaciones de los sistemas de evaluación y acreditación de la educación para que a través de estándares de calidad se logre el avance de la producción de contenidos por medio del respeto a la autonomía universitaria.
Por Vanessa Calatayud